Venecia está hecha de suspiros
Aunque Venecia es una ciudad que merece con creces ser descrita con bonitas palabras que le hagan justicia a su belleza, me niego rotundamente a describirla cual guia virtual. Porque exactamente esto dejo Venecia en mi. Ganas de contar historias y dejar de quedarme con solo la belleza de los escenarios. Había regresado, después de 5 años, volvía a ese Atlantis que se resiste a hundirse. “Venezia” ya se leía en los sacos de los Suvenires. ya los tonos de voz subían, ya la gente había dejado de hablar, ahora cantaban esa lengua sensual y adictiva que la fascino también la primera vez, Italiano. El balbuceo de mi acompañante rompió mi ensimismamiento. esa fascinante escena de la pareja en la góndola con el gondolero entonando “sole mio”, ahora me pareció un déjà vu y de golpe recordé la góndola del profesor hundiéndose bajo el “vaporeto” , no me iría de esta hechizante ciudad sin descubrir el misterio de su aparente “accidental” muerte. -Mesa