Te quiero libre, y me quiero libre contigo
"Es que no la sufren", "no son capaces de mantener una relación estable", "no aguantan nada" “el tipo se buscó otra porque en la casa no lo atendían bien”.Son los comentarios de las generaciones pasadas para la nuestra y las que llegan. Ayer escuché “El hombre le pidió el divorcio, dijo que para ella lo más importante es su carrera y que siempre había algo más importante que él.”
Y bueno es que nos separa nada más que la diferencia generacional entre una
carta y un mensaje instantáneo, un café caliente y un shot de tequila. Para la generación
de la inmediatez, de lo fugaz, del momento, para la generación a la que el
mundo se le encogió entre tantos viajes, para la generación de las personas
globalizadas, resulta complicado sentir que debemos elegir entre el tipo de
amor que nos legaron o el placer de vivir una vida plena y libre sin “aguantes”
sin “sufrir” sin “renuncias”.
Aunque el reto es grande, aunque hay días en que quiero dejarlo todo y tomar el mundo con las manos hay otros en que el mundo parece ser tomar su mano. Me alegra enfrentar ese dilema
y no ser esclava de la vieja fórmula para la felicidad porque en un mundo de probabilidades
infinitas a mí que no me salgan con que una más uno son muchos hijos y eso es
igual a realización.
La cosa se puso interesante ahora porque el amor no se está perdiendo, está
cambiando. Las personas se están atreviendo a soñar más allá, están lanzándose con
o sin compañía a las probabilidades fuera de su zona de confort buscando en
cada momento sentirse felices. Y quiero creer que es porque se aman a sí mismas y no gente, eso no es egocentrismo o egoísmo, el amor propio es un requisito
para ese amor de pareja que tantos buscan desesperadamente cuando no logran
sentir amor propio.
¿En ese orden de ideas porque es ahora más complicado ese amor de pareja
si al parecer hemos aprendido a amarnos mejor y eso implica un amor más sano y
fuerte con otro? Pues porque nos enseñaron que no se puede tener todo en la
vida. Que tenemos que elegir. Y cada vez son más pocos (menos mal) los que
eligen al otro sobre el amor por sí mismos. No puedo evitar pensar en lo egocéntrico que puede sonar eso y no es que
yo sea una mala persona y que no me importen en absoluto los demás, pero es que
no hay mejor forma de servir al otro que sirviendo a nuestros ideales antes que
todo.
Nadie puede ofrecerle a otro estar en el amor, la salud y la enfermedad sin
antes comprometerse consigo mismo a ser siempre sincero y leal con sus
aspiraciones y sueños. ¿Cuánto puedo
esperar de alguien que me promete estar siempre conmigo mientras le da la
espalda a otras cosas que siempre soñó? “él lo dejo todo por mí porque me ama” sí,
seguro la ama incluso más que así mismo (lo cual probablemente no traiga nada
bueno) y usted ¿cuánto lo ama como para, no solo, dejarlo hacer algo así si no
para creer que eso es garantía de un amor real?
“Esta generación quiere mucho, pero da poco” me dice un amigo y tiene razón.
Y es por miedo, no se puede hacer nada nuevo sin sentir miedo. Nos tocó
inventarnos una nueva forma de amar. Las inseguridades nos atormentan mucho más
ahora que las reglas no están tan claras. Porque la fórmula mágica de la
felicidad ahora incluye variables algorítmicas. Queremos darlo todo, pero y si no recibo nada
a cambio y si me lastima y si traiciona mi confianza. Y pues ahí si chichos lo siento,
pero es que esto es para valientes. No se puede pretender vivir la experiencia
de amar en plenitud a punta de migajas de confianza. Además, si usted se ama a
sí mismo y persigue sus ideales y uno de ellos es amar y amarse no le queda opción
que ser valiente y así como se lanza por sus sueños al otro lado del mundo
lanzarse por amor aunque este muerto del susto, eso sí, con el paracaídas de la
inteligencia emocional siempre acompañándolo.
No tenemos por qué sentirnos desgraciados porque nos tocó una época diferente
para querer, soy una romántica empedernida, pero eso de estar estancados
anhelando amores a la antigua en donde en realidad todo estaba arreglado es una
bobada. Nos tocó el primer turno en la fila y siempre es un poco incómodo no
saber qué hacer pero yo me siento afortunada de la época en que nací.
No hay que complicarse tanto es cuestión de empezar por repensar que
ideas tengo que me inculcaron desde pequeño, cuales me intentan meter en la
cabeza la sociedad, o gente como la loca que escribió esto, y cuales son mías y
construyo a partir de lo que siento y creo, vivir acorde a eso e ir reformulando
y pensando a medida que crecemos y aprendemos porque eso de “cómo has cambiado” debería ser un piropo y no un comentario con
un dejo de decepción porque el que sea el mismo para siempre vivió en vano.
Amar sin límites y sin limitar. Para un montón de muchachitos, como
nosotros, tan adictos a poseer y poseer por el simple hecho de acumular es difícil
aprender a encontrar algo que nos gusta y nos hace felices y dejarlo en
libertad. Pero es que no todo se puede comprar y por eso es tan valioso cuando
en un mundo tan grande coincidimos con esa persona que nos hace sentir admiración,
amor, respeto y alegría y amarla mientras la ves llegar o partir. Y no debería ser
difícil lo absurdo es decir que amamos y arrancarle de un tajo las alas para
que se quede con nosotros.
¿Quieres encontrar el amor? Enamórate de ti. ¿No logras quererte?
Cultiva tus valores, sueños y aspiraciones hasta que te sientas orgullosa(o) de
ti y sientas que te quieres porque lo vales. ¿Alguien te admira y siente que te
ama y tu sientes que también lo amas? Continua con tus sueños, aprendan juntos,
decidan acompañarse en el camino mientras se proporcionen felicidad y sabiduría,
valórense, protéjanse sin enjaularse, amen sin limitar y elíjanse sobre otras
personas todos los días porque creen que juntos están mejor pero no porque “tocó”.
¿Se quieren, te quieres, pero sus sueños van por caminos diferentes? Nada más
placentero que ver a quien quieres cumplir sus sueños, aunque sea lejos de ti
porque entiendes que esa persona no te pertenece que es libre y que amas hasta
sus sueños y su libertad y que ningún camino es tan diferente o distante del
otro si el amor los une.
Aleja me diste en la vena del gusto con este articulo muy lindo.... es un placer leer cada letra, palabra y verso
ResponderBorraro gente como la loca que escribió esto <3
ResponderBorrar