Me caí de la cama y desperté.
Cuando pienso en el alma supongo que es blanca y reluciente, es su mejor estado, últimamente la mía esta sucia, me caí y se ensució y por más que trato de sacudirme el polvo la mancha se fija más.
Ojeras bajo el maquillaje, lagrimas contenidas y disimuladas tras un bostezo, alcohol que nubla la mente, ruido y oscuridad. Y me sigo ensuciando el alma en mi desesperado intento por sacudirme el polvo.
Días completos de sueño, noches cortas de pesadillas y comienzo a ignorar el pasado y a borrar el futuro juntos.
No lo reconozco y empiezo a extrañar al que solía ser, para después darme cuenta de que todo fue un invento mio, realmente nunca existió, mi mente lo creó y cuando se cansó de inventarlo cada día en su afán por obviar todo lo que nos separaba, quedó ese desconocido que hoy sale de mis sueños y me deja pesadillas.
Me jodí yo sola, mis ganas de que fuera él. -"Escribe, escribe que eso ayuda"-. Y vomito todo este dolor. Lo que escribo es el reflejo del estado de mi alma y mi mente, y no me gusta para nada lo que veo. -"Calma, calma...estas triste es normal"- Abraza ese dolor, acéptalo, míralo a los ojos tal y como es, y déjalo ir, como hiciste con él.
Freire dijo "La mejor manera de uno acercarse es distanciarse", yo lo vi todo en la distancia, y se me cayó el alma a los pies.
Ánimo! Todo forma parte de la vida, recibe todo nuestro apoyo y cariño.
ResponderBorrarTe queremos mucho, tus abuelos.